Diez estrategias alimenticias para posponer el envejecimiento.
¿Quién no quiere llegar a la vejez en las mejores condiciones físicas y psíquicas? Las recetas antiedad retrasan los efectos del envejecimiento y reducen el riesgo de contraer enfermedades.
En el libro Recetas antiaging (editorial Salsa Books), el doctor Manuel Sánchez y los chefs Carme Ruscalleda y Raúl Ballam ofrecen el secreto de la gastronomía antiedad con asesoramiento médico. La clave está en “utilizar productos de proximidad y de estación elaborados según las costumbres de cada región”, afirma el doctor.
Los factores genéticos condicionan cómo nos vamos haciendo mayores, pero no son los únicos. El estilo de vida influye en el ADN y puede ayudarnos a cumplir nuestro objetivo: vivir más y mejor, es decir, morir “jóvenes” pero lo más tarde posible.
LAS CLAVES
En este libro, los autores ofrecen varias normas para elaborar nuestra dieta antiedad durante todo el año. Estas son algunas de ellas:
1. Cuatro o cinco piezas de fruta fresca, ensalada o verdura al día.
2. Productos crudos y de temporada acompañados de ajo, cebolla, pimiento rojo, aguacates, aceitunas o almendras. “Un plato multicolor es garantía de salud”.
3. Proteínas vegetales: potajes de legumbres, soja fermentada, aceite de oliva… Todos estos alimentos son muy ricos en antioxidantes. La proteína vegetal debe predominar sobre la animal.
4. Tres raciones de pescado azul a la semana. Es muy rico en Omega 3.
5. Hidratos de carbono, los justos y necesarios. Hay que reducir al máximo los que proceden de dulces, pastas y pastelería industrial, sobre todo si se hace una vida sedentaria. En cualquier caso, es preferible consumirlos al mediodía y no en la cena
6. Aceite de oliva extra virgen extra. Reduce el riesgo cardiovascular, mejora el paso intestinal de los alimentos, combate enfermedades como la diabetes o la hipertensión y aporta antioxidantes.
7. Agua embotellada de mineralización baja, no del grifo. Lo ideal son dos litros al día.
8. Dos copas de vino al día tienen efectos beneficiosos sobre el sistema óseo e inmunitario y actúan como protectores celulares.
9. Frutos secos: nueces, avellanas o almendras. Aportan proteína vegetal, vitaminas y fibra.
10. Consume productos de estación. Si comemos una fruta fuera de su temporada, estamos tomando un producto importado que ha pasado semanas en cámaras y ha perdido su sabor.