La humilde vivienda de Francisca Pérez se ha convertido en un lugar de peregrinación desde el pasado martes.
La humilde vivienda de Francisca Pérez se ha convertido en un lugar de peregrinación desde el pasado martes, tras la aparición de una figura que se asemeja a un ángel en las aspas de una lavadora.Doña Mitidín, como es conocida la señora por los vecinos de la calle Respaldo 36 en Cristo Rey, narra que se disponía a lavar la noche del martes cuando la figura se dibujó en el fondo del aparato con el detergente.

 Afirma que su hijo Hernán fue quien le advirtió que no echara agua a la lavadora para que los vecinos también pudieran apreciar “la imagen divina”. “¡Ese es un ángel de luz, Jesús está con nosotros!” no se cansaba de repetir la señora con sus brazos abiertos, aferrada a la idea de que a partir de la aparición la situación de inseguridad que azota al sector cambiará. “Esta es una señal grande”. Los vecinos han encendido velones encima de lavadora y decenas de curiosos no paran de visitar la casa.