Una estación de energía nuclear en el estado de Massachusetts tuvo que cerrar sus puertas, y a millones de residentes se les pidió que permanezcan en sus hogares. Cinco estados a lo largo de la costa este declararon el estado de emergencia y se espera que caiga hasta un metro de nieve en algunos lugares. Los vientos de más de 100 kilómetros por hora han derribado árboles y cables de electricidad. Casi todos los vuelos fueron cancelados, así como los servicios de trenes. Los meteorólogos dicen que podría ser la peor tormenta en décadas en la región de Nueva Inglaterra.