Además de llorar la derrota de 1-7 ante Alemania en el partido de semifinales, cientos de hinchas brasileños han salido a las calles de São Paulo y han quemado banderas de su país.
Según apuntan algunos medios locales, la Policía tuvo que usar gases lacrimógenos para dispersar a la multitud en las ciudades brasileñas, incluyendo Sao Paulo, Belo Horizonte y Río de Janeiro. También a las afueras del estadio Mineirao se han registrado disturbios.Leer más