Una pareja se quedó pegada mientras tenia relaciones en el mar y se dieron cuenta que no podían separarse.
El suceso, conocido técnicamente como 'penis captivus', no suele ocurrir con normalidad, de hecho son remotas las probabilidades, pero a esta pareja le ocurrió en el entorno más inapropiado.
Según narra el diario italiano ilmattino los enamorados pidieron a una bañista que les arrojara una toalla para ocultar, en la medida de lo posible, lo que les acababa de suceder. Acto seguido, llamaron a los servicios de emergencia y les trasladaron al hospital.
Una vez allí, los facultativos no daban crédito a lo que estaban contemplando. Pese a pasar un periodo de tiempo considerable, el miembro del hombre continuaba atrapado en la parte de la mujer y la pareja no podía separarse más de dos centímetros. Los doctores provocaron mediante una inyección que los músculos de la parte de la mujer se relajasen para liberar el miembro viril.
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